La infancia y etapa de formación de
Antón García Abril transcurre desde 1933 hasta 1957. Sus primeros estudios en
Valencia 1947-52 (Becado por la
BDT ). En Madrid (1952-57) con ángel Mingote, profesor del
conservatorio. También fue estudiante en el Real Conservatorio Superior de
música de Madrid, 1952-57. Entre 1954-56 realizó durante los veranos estudios
en la prestigiosa academia de Chigiana de Siena. Entre otros cursos asiste al
de música cinematográfica con el maestro Francesco Lavagnino.
Entre 1909-1987, etapa con Angelo
Francesco Lavagnino. Con él fragua su estilo en la melodía, la música popular,
la expresividad y la calidez de lo sencillo. Como buen compositor italiano puso
música a todo lo que se le puso por delante componiendo de esta forma la primera
filmografía enorme, que abarca desde el peplum, pasando por el espagueti
western, hasta las películas de aventuras, ciencia ficción, etc. Películas
destacadas ¡Campanadas a media noche!,
o La regenta.
García Abril tiene sus inicios en el
cine hacia el año 1959, siendo todavía estudiante en Madrid, cuando José Mª
Belloch, a la sazón juez de Teruel y guionista en esos momentos de la película Torrepartida (1956) rodada en
Albarracín, lo recomendó a su director, Pedro Lazaga, para que compusiera la
música. Al principio la idea no le agradó mucho, pero finalmente aceptó y
trabajaría con aquel director durante varios años.
Otras películas: Las muchachas de azul (1957), Los tramposos (1959), etc. La fiel infantería, famosa film en la
que la banda sonora obtiene el Premio
Nacional del Sindicato de 1959, galardón que volvería a conseguir en 1968 con Lazaga
y en 1975 con Los pájaros de Badén de
Mario Camus.
Otros premios: La Medalla del Círculo de
Escritores Cinematográficos en 1968 y el Premio “Luis Buñuel” de cinematografía
en 1977.
En los 60 la producción de García
Abril se centra en el género de la comedia popular al que se amoldó con
habilidad y eficacia. Puso música, desde La
ciudad no es para mi a toda la filmografía de Francisco Martínez Soria con
Lazaga: ¡Qué hacemos con los hijos!, El
turismo es un gran invento, Abuelo made in Spain, El padre de la criatura, El
abuelo tiene un plan, El alegre divorciado, Estoy hecho un chaval, y Vaya par de gemelos.
En Abuelo in Spain, hay una presencia de varios temas populares
interpretados por Los Gritos que convivirán con un tema clave y otro de
resonancias jazzisticas en un trabajo musical que se pone al servicio de una
comedia costumbrista no exenta de terrorismo.
El
dabadismo más conocido fue:
- Sor Citröen (1967)
- El turismo es un gran invento (1968)
- Crimen imperfecto (1970)
- Verano del 70 (1971)
- Vente a Alemania, Pepe (1971)
En Sor Citröen su tema principal, con coros feministas que interpretan
un dabadá típico de la época. Antón García Abril introduce el tema de la
película francesa “un hombre y una mujer” creado por el músico Francis Loi y
cantada por Pierra Beaouh.
El Spaguetti,
Western o el western a la
Europa.
En Tierra brutal (The savage guns), dirigida en EEUU por Michael
Carreras en 1961 de la que se dice fue el primer western rodado en España.
En Adiós, Texas por Fernandino Baldi en 1967. Western
protagonizado por Franco Nero con cierta influencia de Ennio Morricone,
realizando un estilo más persona y expresivo y alejándose del brillante
sinfonismo.
A mediados de los años 60, García Abril pondrá música a dos
filmes de la productora zaragozana Moncayo Films, ambos de tema criminal: “El
rostro del asesino” 1965, de Pedro Lazaga; “Culpable por un delito” 1966, del
aragonés José Antonio Duce.
A principios de los 70, García hace
su participación en el cine de terror hispánico debido a la posibilidad que
veía de experimentar nuevas vías de música cinematográfica, utilizando
primitivos sintetizadores y medios electrónicos.
En el 76,
con El perro de Antonio Isasi, se
puede apreciar la adaptación de la banda sonora a la acción de la película. Con
la música eléctrica trata de integrar elementos y lenguajes acordes a las
necesidades dramáticas de cada secuencia y contexto del relato. Utiliza cuatro
tipos de elementos instrumentales: sinfónicos (cuerda, viento…), de música
ligera (guitarras y bajos eléctricos…), electrónicos (teclados, efectos…) y
“étnicos” (guitarra española y flautas andinas).
En el 79, El crimen de Cuenca, con su partitura de
aires neutros e inquietantes (al comienzo y al final de la película) genera un
ambiente procesal, frío y administrativo durante la historia. Se podría decir
que la música simboliza la acción de la película.
La colmena (1982), la banda sonora de
melodía nostálgica elaborada por un saxo y un cuarteto de cuerda, ilustra de
forma expresiva y deprimente la posguerra que retrata la película. Sólo aparece
en el clima dramático de la película (cinco secuencias y en la apertura y
cierre)
Los Santos Inocentes (1984), la banda sonora compuesta de dos partes, pero ambas
de tono entristecido. La 1ª es una composición por percusiones y sonidos
experimentales, relacionada con Azarías y la “milana bonita” apareciendo ambos
cuando interactúan y en la escena final del ahorcamiento. La 2ª es “atonal, ejecutando con un rabel, perfecto
para descubrir a insinuar la tragedia de esa España clasista y subdesarrollada”
En
el 85, Réquiem por un campesino español, música
que incluye sonidos aragoneses y que resalta el momento de mayor intensidad dramática.
Junto con la banda sonora de la serie “Ramón y Cajal” es la más aragonesa. En
ella colaboró la rondalla “Alegría” de Alcañiz.
En 1985, Monsignor Quixote. Su banda
sonora consiguió el premio “The music Retarles Association Annual for
Excelencce”, para ser interpretado por la orquesta filarmónica de Londres en
Albert Hall. Adaptación de la novela homónima de Graham Thames Television.
Series
Durante los años 70, TVE vive años
de esplendor basada principalmente en programas dramáticos, donde García Abril
encontrará una libertad creativa enorme.
Con El
Hombre y la tierra, la sintonía de esta serie permanece en la memoria de
los españoles, con sus inolvidables percusiones y flautas, su aire exótico y su
gran potencia dramática. La ilustración de cada capítulo es una sucesión de
pequeñas obras maestras. La música consigue una humanización de los animales,
debido a que cada uno tiene asociada la composición que lo
personifica-identifica: el lobo ibérico, el
buitre sabio etc.
Fortunata y Jacinta, todo un mito de Televisión, fue una de las primeras superproducciones
directas basadas en una novela de prestigio adaptado para TV.
Santiago Ramón y Cajal (1982) serie basada en un guión del aragonés Santiago
Lorán, dirigida por otro aragonés, José María Forqué, con la finalidad de
rendir homenaje a otro aragonés universal. Con un tema principal de aire
aragonés, homenaje de vuestro paisano a vuestra tierra y el protagonista de la
serie.
Anillos de Oro, serie dramática con guiones de Ana Diosdado y dirigida por Pedro Masó. Cabecera musical muy celebrada debido a
que tiene una partitura sinfónica con un fino y delicado sentido de la melodía,
adaptaba a las peculiaridades de cada capítulo.